Últimamente he observado que más de un estudiante de ingeniería informática trata de justificar una chapuza diciendo que es una “decisión de diseño”, como si esas tres palabras fueran un comodín que permitiera salir de cualquier situación comprometida sin tener que dar más explicaciones.

Si un estudiante, o cualquiera, me quiere convencer de que ha tomado una decisión de diseño acertada, me tendrá que explicar qué alternativas consideró, y por qué eligió la alternativa que me está presentando. La forma de demostrar que sabes lo que haces, es presentar tus decisiones como elecciones conscientes, deliberadas y razonadas entre alternativas razonables. La forma de comprobar que alguien sabe lo que hace es pedirle que justifique sus decisiones de esta forma.